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Septiembre - Mes de la Biblia

La Biblia es el fundamento de la Reforma Protestante



La Biblia: fundamento de la Reforma Protestante

Por Lic. Pablo Bordenave, Capellán del Colegio Ward

Estamos transcurriendo el año en el que se cumple el 500º Aniversario de la Reforma Protestante, donde el monje Martín Lutero, a partir de su lectura de la Biblia y sus vivencias personales, le dijo no a una iglesia que lejos de llevar libertad a los cautivos solo buscaba egoístamente su propia satisfacción.

En medio de estos festejos llegamos al mes de Septiembre, que es para todos los cristianos el mes de la Biblia. Tanto los hermanos Católicos Romanos como los Evangélicos celebramos, recordamos y compartimos este motivo tan especial para nuestra fe. El 30 de septiembre la Iglesia católica romana celebra la festividad de San Jerónimo que tradujo la Biblia del griego y hebreo al latín, la llamada Vulgata.

Por el lado de la iglesia evangélica el 26 de Septiembre de 1569, se concluyó la impresión de la Biblia en español llamada la “Biblia del Oso” (en su portada aparece un oso comiendo miel de un panal). Fue traducida por Casiodoro de Reina, y en esa oportunidad se imprimieron 260 ejemplares en Basilea, Suiza. Esta traducción, que posteriormente fue revisada por Cipriano de Valera en 1602, dio origen a la famosa versión “Reina Valera”, tan reconocida y amada por los evangélicos hasta hoy. La Biblia del Oso fue la primera traducción completa en español traducida desde los idiomas de los manuscritos originales (hebreo, griego, arameo). Traducciones previas de la Biblia eran desde la Vulgata Latina.

La Biblia es para nosotros el testimonio de La Palabra de Dios, reconocemos que en sus páginas se refleja la acción, la voluntad, y le mansaje divino como fue percibido en distintos momentos de la historia humana. Reconocemos que el Espíritu de Dios ha inspirado a quienes comunicaron esa presencia revelada a los seres humanos. Peor también reconocemos que aquellos testigos, lo vivieron y lo expresaron en condiciones concretas, con las limitaciones de situación y cultura. Estos textos bíblicos son expresiones de la fe que Dios ha inspirado y también son expresiones humanas de esa fe, y deben comprenderse situados en las condiciones concretas  de esos testigos.

Queremos señalar que los libros de la Biblia, tanto del Antiguo Testamento como del Nuevo, expresan una diversidad de movimientos que a lo largo de siglos y milenios fueron dejando por escrito sus vivencias en relación a Dios, al ser humano y al mundo compartido. Leída desde esta perspectiva la Biblia ayuda a acercarnos a quienes no piensan, actúan o celebran como lo podemos hacer desde una determinada tradición.

Desde nuestra fe cristiana, en la Biblia descubrimos el testimonio de la vida de Jesús de Nazaret, una vida siempre inclusiva, sobre todo a los que sufren, a los más desvalidos, a los que quedan fuera por causa de sociedades que excluyen. Será desde esta vida que nos acercamos a leer cada página de dicha escritura, siendo esa vida la clave de lectura de todo el texto, respetando también nuestra tradición metodista que nos enseña que debemos:  “Pensar  y dejar pensar”.

¡Que sea la Biblia para nuestras vidas, un texto que nos permita descubrir al Dios de amor del cual hablan sus páginas! ¡Aprovechemos este mes para acercarnos a ella!

Les comparto algunos links que pueden ser de interés:

www.sba.org.ar/MesdelaBiblia

https://iglesiametodista.org.ar/recursos/reflexiones-recursos-conmemorar-los-500-anos-del-movimiento-la-reforma/